E un giorno, le traduzioni
Y UN DIA... [E un giorno...]
Traduzione spagnola di José Antonio
Y un día te despiertas como pasmada y de golpe te das cuenta
que ya no están aquellos maravillosos días de prescolar,
de juegos, de amigos, y si miras a tu alrededor no divisas
las cosas de siempre, sino un vago y confuso perfil.
Y un día caminas por la calle y de repente comprendes
que no eres la misma que iba por la mañana a la escuela,
que el mundo ahí fuera te espera y tú casi sucumbes
comprendiendo que latido a latido es la edad que echa a volar.
Y tu padre te parece más viejo y cada día más distante,
no cuenta ya cuentos y ni te coge de la mano.
Parece que no comprenda tus sueños siempre tensos entre la realidad y la esperanza
y suspendidos entre deseos alternos de irse y quedarse...
de irse y quedarse
Y un día evocas tu casa y ya no es la misma
en la que lento el tiempo malgastabas cuando eras niña,
en la que cada objeto era un símbolo y una promesa
de cosas increíbles y de café con leche en la cocina.
Y la habitación con los "posters" en la pared y los discos rayados
perdidos en medio de tus libros, de regalos que ni siquiera recuerdas
parece casi el relato de tantos momentos pasados
como el piano estudiado y abandonado hace años en dos acordes.
Y tu padre te parece aburrido y cada vez más distraido,
no inventa ya juegos y contigo está perdiendo el contacto.
Y tu madre lejana presente en tus sueños tiene que hacer y decir
pero puede ser que no alcance a saber que sueños recomendar...
que sueños recomendar.
Luego un día en un libro o en un bar todo se aclarará,
comprenderás que otros se hicieron ya las mismas preguntas,
que no es solo dulce lo que te espera, sino también mucho amargo
y que sin un precio salado, uno no se hace mayor.
Tus discos, tus "posters" serán olvidados para siempre,
dejarás, sonriendo, desvanecerse tus mitos felices
como objetos infantiles, lejanos y empolvados,
encontrarás nuevos caminos, otros intereses y tendrás nuevos amigos.
Sentirás que tu padre te asemeja, lo verás un poco loco, un poco sabio,
en el gastar siempre igualmente miedo y valor;
el miedo y el valor de vivir como un peso que cada uno lleva,
el miedo y el valor de decir: "siempre lo intenté...
siempre lo intenté".
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